Congruencia: Por Qué las Acciones Importan Más Que las Palabras

En un mundo lleno de ruido, sé quien deja que las acciones hablen por sí solas.

Amar a través de acciones

Al crecer, tuve una experiencia distinta a la de la mayoría de los niños. Mientras otros esperaban las vacaciones para descansar y jugar, mis recesos escolares los pasaba trabajando junto a mi padre en su negocio. Él no era del tipo expresivo; nunca me colmó de elogios ni de palabras afectuosas. Sin embargo, tenía su propia forma de mostrar amor, una que en ese momento no comprendía.

Mi papá tenía un pequeño restaurante especializado en alimentos a base de maíz, populares en Brasil y en toda América del Sur. Uno de sus platos icónicos era la pamonha, un postre de maíz similar a los tamales. Prepararla requiere un proceso intenso: primero, se quitan las hojas de maíz una a una, se desgranan los granos, se mezclan y cuelan hasta alcanzar la consistencia adecuada, se agregan los ingredientes, se envuelve todo en las hojas y luego se cocina a la perfección. Y este era solo uno de los muchos platillos que él preparaba cada día.

Cada vacación, mientras otros niños jugaban, yo estaba en su restaurante. No lo apreciaba en ese entonces y no entendía por qué insistía tanto en que estuviera allí cada vacación escolar. Solo años después comprendí que me estaba protegiendo, manteniéndome cerca y lejos de malas influencias. Esa era su manera de garantizar mi seguridad y enseñarme lecciones valiosas, aunque casi nunca me lo expresaba con palabras.

Así, cada vacación, veía a mi papá trabajar sin descanso. Pintaba el exterior del restaurante, pagaba salarios, saludaba a los clientes con calidez y siempre buscaba perfeccionar sus recetas. Sus empleados dependían de él, y él jamás los decepcionaba. Quizás no tenía las palabras para decir que me amaba, pero me brindó un espacio donde aprendí sobre la resiliencia, la disciplina y la responsabilidad. Esa fue su manera de transmitir sus valores.

El Verdadero Significado de la Congruencia

Hoy, vivimos rodeados de palabras. Estas inundan nuestras pantallas y conversaciones: promesas grandiosas, declaraciones de amor, afirmaciones sobre lealtad y valores. En este torbellino, es fácil quedar atrapado en lo que se dice. Pero muchas veces, esas palabras no se sostienen. La congruencia, la alineación entre palabras y acciones, es una cualidad rara y esencial. Cuando las palabras de alguien están en sintonía con sus acciones, se genera confianza, autenticidad y relaciones duraderas.

A menudo, confundimos esto. A veces, alguien puede parecer rudo o distante al hablar, pero muestra amor y compromiso a través de sus acciones. Otras veces, las personas usan palabras cariñosas pero fallan en cumplirlas cuando realmente importa. Mi padre no era expresivo, pero sus acciones nunca vacilaron. Nos mostró a diario lo que significaban el cuidado, la protección y el trabajo arduo. Así que, ¿por qué las acciones importan más que las palabras?

Por Qué las Acciones Importan Más Que las Palabras

En un mundo donde las palabras están en todas partes, su peso ha disminuido. Políticos, influenciadores y marcas suelen usarlas para influir en opiniones, prometer cambios o parecer cercanos. Pero sin acciones que las respalden, las palabras rápidamente pierden sentido. Es fácil decir lo que otros quieren escuchar, pero la verdadera integridad y confianza provienen de lo que realmente haces.

Mi papá tal vez nunca me dijo, "Te mantengo cerca porque me importas", pero sus acciones lo mostraron. Cada sacrificio que hizo para mantener estable a nuestra familia, cada noche que trabajó hasta tarde para proveer y cada cliente que saludaba con una sonrisa me enseñaron más de lo que cualquier palabra podría haberlo hecho. Ahora, al reflexionar, veo que su falta de palabras grandiosas no hacía su amor menos real, solo hacía que sus acciones hablaran con más fuerza.

La Congruencia, un Valor que Debemos Apreciar

La congruencia es uno de los valores más importantes que debemos conservar, especialmente cuando las palabras solas ya no son suficientes. Las conexiones genuinas y el respeto se construyen cuando las palabras coinciden con las acciones. Imagina escuchar a alguien decir, "Siempre estaré ahí para ti", solo para encontrarlo ausente cuando lo necesitas. O la diferencia entre alguien que dice "Te amo" cada día pero nunca lo demuestra, y alguien que rara vez lo dice, pero está ahí cuando realmente lo necesita.

En tus relaciones, en el trabajo o con la familia, ve más allá de lo que la gente dice y enfócate en lo que hace. Hablar de congruencia es fácil, pero vivir con congruencia es difícil. Las personas que nos muestran sus valores a través de sus acciones merecen ser profundamente valoradas porque su integridad construye la base para una conexión y respeto auténticos.

Un Llamado a Valorar Más las Acciones que las Palabras

Si algo aprendí de mi padre es que las acciones son la prueba definitiva del carácter. Al recordar todas esas vacaciones a su lado, veo que me estaba dando más que solo experiencia laboral. Me enseñaba sobre integridad, resiliencia y la importancia de cumplir. Sus acciones me mostraron lo que realmente significan el amor, el cuidado y el trabajo duro.

En tu propia vida, presta atención a las acciones que refuerzan las palabras. Reconoce cuando alguien te muestra amor, compromiso o cuidado a través de sus actos. Aprecia a quienes revelan sus valores a través de sus acciones, aunque no sean los más expresivos. Y esfuérzate por vivir con congruencia tú mismo, dejando que tus acciones hablen tan fuerte como tus palabras.

En un mundo lleno de ruido, sé quien permite que las acciones lideren el camino.